1. Limpieza
2. Reparación
3. Fijaciones
4. Almacenaje
1. Limpiamos todo el material con un trapo fino y detergente suave. Eliminando los posibles restos de suciedad y lavamos los botines interiores.
2. Cubrimos con Cofix los desperfectos de la suela para que quede lisa. Afilamos los cantos y enceramos la suela con una capa más gruesa de lo normal para que se hidrate bien todo el verano.
4. Guardaremos los equipos en un lugar seco, alejados de la luz directa del sol y la humedad para evitar que se oxiden los cantos. Las botas las mantenemos cerradas pero sin apretarlas demasiado para evitar que se deformen.
Si tienes alguna duda o necesitas ayuda con el mantenimiento consúltanos aquí.