El otoño ya está aquí y antes de que nos demos cuenta habrá comenzado la temporada de esquí. Es el momento de ir preparando ese plan de fin de semana en Sierra Nevada o las vacaciones en familia, siempre siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias y de las empresas organizadoras. El turismo seguro es posible.

La clave para disfrutar sin preocupaciones está en la buena organización, así que te damos unos consejos para pasar un fin de semana inolvidable en Sierra Nevada.


Consejos para un fin de semana en Sierra Nevada: esquí, snowboard y otras actividades

Lo primero es hacer las reservas de rigor, más aún si se trata de temporada alta. Ten en cuenta que el COVID-19 ha motivado que se tomen medidas preventivas que pasan por la limitación de aforo, tanto en alojamientos como en actividades. Debes asegurarte de que tendréis dónde quedaros, material para vuestras actividades y monitores libres para la práctica.


Una vez reservado, ve haciendo una lista con todo lo que vas a necesitar, sobre todo en lo que a equipamiento se refiere. Dependiendo de la actividad que vayas a realizar necesitarás tabla, fijaciones o esquís, además de botas, ropa térmica, guantes impermeables, gafas y crema solar, entre otros.


Si ya tenéis equipos no necesitaréis alquilar, pero lo ideal es que lo guardéis todo en una bolsa especialmente preparada en la que quepa todo y el material no se deteriore.


Planifica bien el fin de semana, teniendo en cuenta las actividades que vais a hacer. A continuación te ofrecemos algunas opciones, pero tampoco lleves una programación al detalle. También debe haber hueco para el relax y la improvisación.


Organiza tu fin de semana

Para organizarlo todo y hacer esas reservas imprescindibles, lo mejor es saber qué hacer en Sierra Nevada. Lo vemos.


1. Tomar unas clases de esquí

Uno de los grandes clásicos son las clases de esquí, y en Snowmotion las ofrecemos a adultos y a niños. Es importante adquirir una buena técnica que permita disfrutar de la actividad de manera segura, considerando lo que ya sabes. Por eso nos adaptamos a todos los niveles: desde el 0, donde se producen la primera toma de contacto; hasta el E, que es el de perfeccionamiento.


Las clases se pueden reservar de forma individual o en grupo, sea con familiares o amigos, así que podréis practicar juntos.


2. Tomar unas clases de snow

Es algo más complejo, pero muy divertido. En este caso, los niveles de las clases de snowboard van del 0 al D, de manera que cubrimos cualquier grado.


En el caso de los niños, tanto si hacen esquí como si es snow, nos afanamos en trasladar valores educativos de respeto al medio ambiente, hábitos saludables, desarrollo personal, autonomía, empatía y conciencia de sus limitaciones, pero siempre promoviendo sus deseos de superación.


3. De campamento

Es una actividad pensada para niños en la que pueden completar escapadas cortas a la montaña en días festivos, acompañados por familiares, amigos o compañeros. Los campamentos infantiles en Sierra Nevada son ideales para la Semana Blanca y la Semana Santa, y los padres pueden confiar en nosotros mientras disfrutan de la nieve a su aire. Pueden aprovechar para descansar.


4. Conocer el entorno natural

Sierra Nevada está en término de Monachil, un enclave privilegiado con muchas posibilidades para las actividades deportivas en el medio natural, como el senderismo.


Una opción para conocerlo bien es acercarse al Centro de Visitantes El Dornajo, que muestra de forma didáctica toda la riqueza natural y cultural de la zona.


5. Tener una cita con las estrellas

Puede que nos haya quedado muy poético, pero el astroturismo está ganando peso en el parque. A través de la web oficial de la estación de esquí se puede reservar el traslado a la cumbre Veleta para ver el amanecer o el atardecer a 3000 metros de altitud, lo que incluye una breve explicación y un tentempié o desayuno básico. Si te preguntas qué hacer en Sierra Nevada si no esquías, aquí tienes una respuesta.


Un fin de semana en Sierra Nevada, en resumen, puede convertirse en inolvidable si está bien planificado. La buena organización permite saber qué reservar y qué llevar para que no falte de nada.